Al museo de Sevilla iba a diario Juan Miguel a copiar las maravillas de Murillo y Rafael y, por las tardes, como una rosa de los jardines que hay a la 'entra¡' pintaba Trini, pura y hermosa, como si fuera 'La Inmacula¡' Y decaa el chavalillo: "'Pa' qua voy a entrar aha si es la virgen de Murillo la que tengo frente a ma" Trinia¡, mi Trinia¡, la de la Puerta Real, carita de nazarena, con la virgen Macarena yo te tengo 'compara¡' 'Argo' tu vida envenena que tienes en la 'mira¡' que no me parece buena, Trinia¡ ¡Ay, Trini, mi Trini, ay Trinia¡! El museo sevillano un mal daa visita³ un banquero americano que de Trini se prenda³ Y con el brillo de los diamantes la sevillana 'quea³' cega¡ y entre los brazos de aquel amante huya³ de Espaa±a la Trinia¡ y ante el cuadro no 'acabao' asa decaa el pintor "Taº me has hecho un 'desgraciao' sin ti qua voy a hacer yo" Trinia¡, mi Trinia¡, la de la Puerta Real, carita de nazarena, con la virgen Macarena yo te tengo 'compara¡' 'Argo' tu vida envenena que tienes en la 'mira¡' que no me parece buena, Trinia¡ ¡Ay, Trini, mi Trini, mi Trinia¡! ¡Ay, Trini, mi Trini, ay Trini